lunes, 22 de septiembre de 2008

ENTRE DOS HOJAS DE UN LIBRO



Pienso en el día en que vendrá,
en la noche que vendrá,
en el silencio y el quehacer.
Pienso en los tiempos
que traerán otros tiempos,
en el infragmentable tiempo ignoto.
Ya, Dentro de poco anochece.
Bajaremos la luz
y nos tendremos en esta tierra,
entre dos hojas de un libro.
Allí se halla, tallado
en la sombra, nuestro rostro.
Era un rostro alguna vez.
Amaba y sufría mucho
y pensaba en el día que vendrá,
en el silencio y en el quehacer.
Ya. Dentro de poco anochece,
Ahora ya ni siquiera somos un rostro,
Bajaremos la luz
y nos tendremos en esta tierra,
entre dos hojas de un libro.
Y no sabremos por qué hemos sufrido,
y no sabremos por qué hemos deseado,
ni cómo pudimos amarte tanto,
suave sonrisa del alba,
áurea estrella de la noche

No hay comentarios: